Un importador mexicano de llantas evasivo

POR MARK HORSTMAN, IA Group

Un importante fabricante de llantas de Corea del Sur envió un pedido de llantas para automóvil por valor de USD 800.000.00 a México. Sin embargo, las facturas quedaron sin pagar. El productor de neumáticos de Corea del Sur solicitó a la oficina de IA en México que iniciara una investigación para cobrar la deuda pendiente.

Los investigadores de IA se pusieron en contacto con el deudor, pero la empresa parecía estar cerrada; sus números de teléfono y direcciones de correo electrónico estaban fuera de servicio.

Una investigación adicional mostró que la empresa mexicana se había establecido solo un año antes con el capital mínimo requerido por la ley para registrarse formalmente como una empresa activa.

Los contactos de IA en la aduana de México confirmaron que el deudor no había importado ninguna mercancía después de recibir el pedido de gran cantidad de llantas de Corea del Sur. Parecía que la empresa se había creado para un número limitado de transacciones y luego había cerrado informalmente, una práctica común en Latinoamérica.

Los abogados de IA visitaron los dos domicilios conocidos del deudor. Uno estaba ubicado en el distrito financiero de la Ciudad de México y parecía haber sido alquilado brevemente como 'espacio de oficina virtual’, sin embargo, había desaparecido repentinamente, inclusive adeudando varios meses de alquiler. La segunda dirección conocida, estaba localizada en otro estado de México y se trataba de una bodega que la empresa mexicana había abandonado por más de seis meses. IA encontró los nombres de los propietarios de la bodega en el registro público.

Al visitarlos, revelaron el nombre de uno de los propietarios del deudor a nuestros investigadores.

Después de localizar al propietario, los abogados de IA lo visitaron, pero él se negó a cooperar. Negó cualquier participación y evadió todos los intentos de contacto posteriores. Como el deudor era 'evasivo' y no era un deudor 'amigable' (cooperador), los investigadores de IA procedieron con el Plan B:

La operación de recuperación comenzó con la investigación de registros públicos en varias ciudades y estados, lo que descubrió otra empresa relacionada con el mismo propietario. El equipo de IA descubrió además que el propietario continuaba importando y vendiendo llantas para automóviles bajo un nombre diferente en otro estado. Con esta información, IA preparó una visita sorpresa...

El equipo de IA se acercó a los propietarios de la segunda empresa. Quedó claro que su falta de cooperación pondría en peligro su negocio actual y se arriesgaría a honorarios legales y multas elevadas debido a las acciones de IA para entablar una demanda por transacciones fraudulentas efectuadas por la empresa mexicana. La empresa mexicana aceptó rápidamente la oferta de los abogados de IA para negociar un acuerdo.

IA les hizo liquidar el pago total de la deuda de USD 800.000.00 en 12 cuotas mensuales al productor de neumáticos coreano. Este caso se cerró satisfactoriamente.