La fusión del distribuidor de automóviles coreano en Filipinas

Una corporación automotriz filipina compró una flota de automóviles SUV a un importante exportador de automóviles chino. Después de que la corporación filipina hiciera el pago inicial, el distribuidor de automóviles coreano envió los vehículos a Filipinas en excelentes condiciones. Desafortunadamente, el comprador filipino no pagó el saldo adeudado por estos automóviles. Los intentos del vendedor de recuperar el resto del pago fueron inútiles. El cliente de IA, una corporación china de seguros de crédito, buscó la asistencia de IA para recuperar el monto multimillonario adeudado por el comprador.

Mientras tanto, la empresa filipina se había fusionado con un importante distribuidor de un conocido fabricante de automóviles coreano. Al ser legalmente responsable de las deudas de la empresa fusionada, el distribuidor de automóviles coreano se convirtió en el deudor formal.

El equipo legal de IA se acercó al contador de la empresa deudora, quien, comprensiblemente, pidió que les enviaran las facturas y los contratos de venta por correo. Necesitaba verificar la deuda heredada de la empresa fusionada. Mientras tanto, los abogados de IA investigaron los artículos de fusión y los documentos corporativos y descubrieron que el distribuidor del fabricante de automóviles coreano era una corporación de buena reputación que funcionaba muy bien.

El abogado local de IA en Filipinas programó una reunión con el director ejecutivo y el vicepresidente de la corporación deudora para discutir amistosamente la situación. Los oficiales cooperaron al principio, pero después de un tiempo, se volvieron evasivos. Luego, nuestros abogados entregaron a la empresa una carta de demanda legal, lo que incitó al deudor a responder de inmediato.

Es entonces que el CEO del deudor alegó que tenían reclamos de garantía por los vehículos entregados contra el exportador chino. Dijo que todavía estaban finalizando sus reclamos en relación con la garantía del fabricante. En otras palabras: quería compensar o reducir sus reclamaciones de garantía contra su deuda con el exportador de automóviles. La reducción de la reclamación de garantía por sí sola es una práctica aceptada. Sin embargo, cuando IA solicitó al deudor pruebas fehacientes de sus alegaciones, no hubo respuesta satisfactoria. Además, de acuerdo con la ley filipina, el abogado de IA señaló una cláusula relativa a la garantía implícita en todos los contratos de venta contra fallas o vicios ocultos. Para las acciones basadas en el incumplimiento de una garantía implícita, el plazo de prescripción es de seis meses a partir de la fecha de entrega de los bienes. En este punto, habían pasado ocho meses. El asegurador de crédito de exportación del vendedor encargó a IA el caso, ya que el acreedor entregó los bienes en Filipinas. Por lo tanto, el deudor no presentó una acción legal dentro del período de garantía prescrito.

Siguieron meses de llamadas de seguimiento y correos electrónicos a la alta dirección de la empresa. Continuando con la presión sobre el deudor, los representantes de IA aprovecharon los contactos comerciales de la empresa de los deudores, lo cual dio resultados exitosos. La empresa exportadora china recibió el monto total de la deuda del distribuidor de automóviles coreano.